En época de apretarse el cinturón las presiones se pueden ver acentuadas, motivadas, en general, por la necesidad de sobrevivir, y en menos casos por la avidez (a veces se llegan a disfrazar de oportunidades de negocio actos simplemente deshonestos, una frase jocosa dice “el deshonesto es quien se viste a destiempo”, es decir mientras todos nos estamos apretando el cinturón, él ya se está poniendo las botas).
Bien normalmente las presiones laborales obedecen a las necesidades empresariales y son comprendidas y aceptadas por la colectividad en cuanto en tanto no generan una tensión ingobernable en un periodo de corto plazo.
Sin embargo, ha salido a la luz un caso flagrante que sí ha generado una tensión a corto plazo, que para los gestores ha resultado ingobernable. Ha ocurrido en el país vecino, Francia, y ha dado como resultado el suicidio de 24 trabajadores en el plazo aproximado de un año y medio.
Los riesgos de carácter psicosocial, análogamente a enfermedades como la ludopatía y otras, no se perciben como una problemática analizable y tratable sino como a una cuestión de actitud social de las personas (que me corrija algún profesional si voy errado) con la que debe continuar adelante sin detenerse a tratar. No obstante la Consellera Sra. Mar Serna ya ha manifestado en varias ocasiones que la prevención laboral en las empresas debe pasar a una fase que incluya el entorno psicosocial, amén del higiénico, ambiental y por supuesto el de seguridad de entorno, máquinas y equipos de trabajo.
Una evaluación de carácter psicosocial debe diseñarse en función de los objetivos que se busquen establecer y, por tanto, bajando al nivel económico que interesa a todos, puede tener un coste relativamente muy asequible considerando que las medidas correctoras que se pudieran derivar vayan a establecer unos mejores entornos de trabajo, y por ende procesos de trabajo, y por añadidura mejores rendimientos.
Para mas información sobre Evaluaciones de Riesgo Psicosocial, contactanos en e.trobada@gmail.com
Muchas gracias,
Santiago Sanz.
Bien normalmente las presiones laborales obedecen a las necesidades empresariales y son comprendidas y aceptadas por la colectividad en cuanto en tanto no generan una tensión ingobernable en un periodo de corto plazo.
Sin embargo, ha salido a la luz un caso flagrante que sí ha generado una tensión a corto plazo, que para los gestores ha resultado ingobernable. Ha ocurrido en el país vecino, Francia, y ha dado como resultado el suicidio de 24 trabajadores en el plazo aproximado de un año y medio.
Los riesgos de carácter psicosocial, análogamente a enfermedades como la ludopatía y otras, no se perciben como una problemática analizable y tratable sino como a una cuestión de actitud social de las personas (que me corrija algún profesional si voy errado) con la que debe continuar adelante sin detenerse a tratar. No obstante la Consellera Sra. Mar Serna ya ha manifestado en varias ocasiones que la prevención laboral en las empresas debe pasar a una fase que incluya el entorno psicosocial, amén del higiénico, ambiental y por supuesto el de seguridad de entorno, máquinas y equipos de trabajo.
Una evaluación de carácter psicosocial debe diseñarse en función de los objetivos que se busquen establecer y, por tanto, bajando al nivel económico que interesa a todos, puede tener un coste relativamente muy asequible considerando que las medidas correctoras que se pudieran derivar vayan a establecer unos mejores entornos de trabajo, y por ende procesos de trabajo, y por añadidura mejores rendimientos.
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Muchas gracias,
Santiago Sanz.
Técnico en PRL Preventia
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